Ruta de senderismo por el Pantà de Sau en Barcelona
Barcelona es una provincia que ofrece muchísimas cosas que hacer y visitar. Una de las actividades más interesantes es la del senderismo, gracias a su diversidad de naturaleza en la que se incluyen montañas, bosques y playas. Hay rutas preciosas por toda Cataluña y para cada nivel. ¡La clave es encontrar la que más se adapte a ti! En mi empresa teníamos un grupo en el que organizábamos rutas de senderismo una vez al mes, y una de ellas fue la del Pantà de Sau, un embalse rodeado de montañas en el norte de la provincia de Barcelona.
En este artículo te explico todo lo relacionado con esta ruta y cómo fue nuestra aventura.
El lugar: Pantà de Sau
El Pantà de Sau (“Pantano de Sau” en castellano) está situado en Vilanova de Sau y pertenece a la cuenca del río Ter. El embalse fue terminado en el año 1962 y el agua inundó un pueblecito llamado Sant Romà de Sau, cuyos restos todavía son visibles. Por ejemplo, es posible ver el pico de la iglesia de Sant Romà de Sau cuando el nivel del agua es bajo.
En cuanto a la distancia desde Barcelona centro, en coche se tarda 1 hora y 45 minutos aproximadamente:
La ruta
Hay diferentes rutas que hacer en esta zona, pero nosotros escogimos la que empieza en Tavertet y hace el siguiente recorrido: Tavertet > Puig de la Força > Pantà de Sau > Tavertet. Es una ruta circular, lo que significa que no tienes que volver por el mismo camino por el que has venido. El nivel de la travesía es medio, con una distancia de 12,16km y un desnivel positivo de 600 metros.
Aquí puedes ver el desnivel con más detalle:
La ruta empieza con un camino desde el que puedes disfrutar de las vistas de las montañas y del embalse. Después hay un tramo en el que tienes que pasar por una especie de pasarela (donde hay un Belén hecho de barro) y que te lleva al Puig de la Força. Este pico es una roca desde la que puedes observar el impresionante paisaje de todo el pantano. Una vez visitado, tienes que volver atrás hasta una señal de información y coger el camino a tu izquierda.
Aquí es donde empieza la parte “difícil”. Este tramo de la ruta es un poco empinado, atraviesa el bosque y el terreno es un poco (bastante) resbaladizo. Tienes que descender con cuidado y lentamente para no tirar piedras sin querer. Si no, es fácil que caigan y puedes hacer daño a los compañeros que van delante. Aunque fue la parte más complicada, personalmente fue la más divertida. Es el momento en el que te das cuenta de quiénes son los montañeros expertos del grupo y los que echan una mano a los compañeros principiantes.
Una vez terminada la travesía y llegas al pantano, te puedes bañar. Vale, el agua no es la más limpia del mundo, pero es suficientemente buena para refrescarte y continuar tu camino. Cuando fuimos nosotros, el embalse estaba en su máximo nivel y podías ver la torre del campanario del pueblo inundado. El resto del pueblecito estaba completamente bajo el agua.
El camino de vuelta a Tavertet es un poco cansado pero fácil en comparación con la primera parte de la ruta, ya que el ascenso es progresivo.
Algunas consideraciones
- Aunque no sea una ruta fácil, en nuestro grupo había principiantes (yo incluida) y la hicimos sin problemas. Quizá íbamos un poco lentos pero es normal porque no estamos acostumbrados a este tipo de excursiones. Aún así, ¡recibir un poco de ayuda se agradecía!
- Puedes llegar al Pantà de Sau solo en coche. Investigamos si había algún transporte público en caso de no tener suficientes coches, pero no encontramos nada de nada.
- Hay diferentes caminos que puedes tomar en esta ruta. Algunos son más complicados así que te recomiendo llevar un mapa de la ruta o tu GPS. Así, sabrás que senderos coger antes de llevarte una sorpresa…
- Hay un restaurante en Tavertet llamado Can Miquel donde puedes disfrutar de un merecido refresco después de la ruta. ¡La mejor forma de terminar un precioso día en las montañas!
Si te interesa el senderismo, en este enlace te dejo información sobre algunas rutas que he hecho en otros países como Estonia o Finlandia.